RSS

Archivo de la etiqueta: Baroque London

THE MONUMENT (LONDON)

Resumen: La columna llamada The Monument (Londres), es un monumento que se construyó en 1677 para recordar el gran incendio de Londres en 1666 y al mismo tiempo para glorificar al rey Carlos I como precursor en la idea de volver a levantar la ciudad. Una columna levantada sobre un gran plinto con relieves simbólicos de lo que ocurrió.

Summary: The column called The Monument (London), is a monument that was built in 1677 to commemorate the Great Fire of London in 1666 and at the same time to glorify the King Charles I as a precursor in the idea of returning to lift the city. A column raised on a plinth with relief great symbolic of what happened.

Londres, domingo 2 de septiembre de 1666, una noche tranquila como otra cualquiera en la ciudad de Londres. Sobre las 2 am, en la pastelería de Thomas Farriner, en Pudding Lane, se produjo un incendio, quizás como otro cualquiera de la ciudad, pero no fue así. Desde la noche del domingo hasta el miercoles 5 de septiembre, el fuego se propagó rápidamente, destruyendo aquello que encontraba a su paso: casas, negocios, calles, iglesias, edificios públicos, puertas… dejando finalmente una ciudad asolada y ennegrecida por el fuego y las cenizas.

Pintura del siglo XVII con vistas de la ciudad de Londres en llamas (A la izquierda, el viejo Puente de Londres, en el centro la catedral San Pablo en llamas y a la derecha los muros de la fortaleza de Londres)

Tras el incendio, los trabajos de reconstrucción de la ciudad se iniciaron poco tiempo después, eso sí, con una exigente normativa relativa a los materiales, modos y estilo arquitectónico, impuesta por el rey Carlos II de Inglaterra (1630-1685), para que este hecho no se volviera a repetir. El gran arquitecto del tiempo de Carlos II, Sir Christopher Wren (1632-1723), presentó un proyecto de reconstrucción de la ciudad que nunca que se llevó a cabo. A pesar de ello, lo que sí llegó a hacer fue la reconstrucción de la Catedral de San Pablo, de la cual ya había hecho diseños desde 1665, así como la reconstrucción de 51 iglesias que habían sido destruidas, quemadas o simplemente deterioradas por el incendio. Otros edificios  llevados a cabo por este arquitecto fueron Marlborough House (o la sede de la Mancomunidad Británica), Hampton Court Palace, Greenwich Hospital o The Royal Observatory en Greenwich, entre muchos otros.

Grabado de la columna The Monument en 1753

Uno de los proyecto que presentó al Rey Carlos II, fue la creación de un monumento en recuerdo del Gran Fuego de Londres y en conmemoración de la reconstrucción de la ciudad. El Monumento se llevó a cabo entre 1671 y 1677 y el resultado es el que hoy se puede ver, precisamente, en la plaza llamada Monument.

Vista actual de The Monument

En esencia, se trata de una columna de estilo dórico de 61 metros de altura, levantada sobre un gran plinto o base y rematada por un mirador que está coronado con una gran antorcha de oro. Por su interior, y subiendo sus 311 escalones, se puede llegar al mirador para obtener unas maravillosas vistas de la ciudad.

Relieve del lado oeste de la base, realizado por Caius Gabriel Cibber

La base del monumento es un gran plinto, trabajado en estilo dórico, en cuyas caras se ubican leyendas (escritas en latín) que narran el hecho conmemorativo. En la cara Oeste, el escultor Caius Gabriel Cibber, realizó un relieve alegórico del Gran Fuego y la reconstrucción de la ciudad. Se trata de un alto y bajo relieve, trabajado con un gran naturalismo. La composición de la obra es triángular, distribuyendo a los personajes en tres grupos: a la izquierda la alegoria de la ciudad de Londres desolada, a la derecha el triunfo y la esperanza de la reconstrucción llevada a cabo por el monarca Carlos II y en el eje central las alegorías de la abundancia y la paz.

Alegorías de Londres, el Tiempo y la Esperanza

A nuestra izquierda aparece una mujer tendida en el suelo sobre unas ruinas con escudos alegóricos (entre ellos un dragón que sostiene el escudo de Londres) y a sus pies una colmena (que representa la Industria, gracias a la cual las mayores dificultades pueden ser superadas). Su imagen es la de una mujer cansada, con el rostro bajo, la melena despeinada y las ropas de su vestimenta desgarradas. Es la alegoría de la ciudad de Londres que se encuentra abatida en el suelo por el desastre acontecido. Un hombre con alas la sostiene por la espalda, el cual simboliza el Tiempo -con el tiempo y la paciencia hay una esperanza de recuperar la ciudad de Londres- y por otro lado, una mujer joven, con cara apacible y tranquila, le señala con su cetro la escena de las alegorías que se encuentran en el cielo -simbolizando la Paciencia y la Esperanza-. Tras esta escena, y en bajo relieve, algunas personas agitan sus brazos y gritan en medio de la ciudad en llamas.

Alegorías de la Abundancia y la Paz

La figura femenina que sostiene a la alegoría de Londres es el punto de unión con la composición alegórica del cielo. Envueltas en una nube, se encuentran dos figuras femeninas que corresponden a las alegorías de la Abundancia (representada con una gran cornucopia repleta de comida, tesoros y monedas) y la Paz (portando una rama de olivo).

El grupo de la derecha está protagonizado por el Rey Carlos II (en un alto relieve bien marcado y definido), como monarca que ordenó la reconstrucción de la ciudad. Su figura y pose se esculpe como un rey triunfador y para ello el escultor recurre a la iconografía del antiguo imperio romano, ya que el rey aparece vestido con un traje de emperador, coronado por la corona de laurel (símbolo triunfal) y con la bara de mando en la mano, todo ello con una  actitud altiva, suprema y gobernante. Le acompaña tras él su hermano Jacobo, Duque de York (y futuro rey Jacobo II) que lleva una corona de laurel que entregará simbólicamente a la ciudad que renace de sus cenizas. Ambas figuras se encuentran sobre un podium de tres escalones (lo que hace realzar aún más a los protagonistas), y bajo el podium, una figura algo deformada expulsa vapor por la boca, representado la alegoría de la maldad y la Envidia (que siempre está presente pero que es vencida por el Triunfo -el Monarca-).

El rey Carlos II, junto con su hermano Jacobo, rodeados de las alegorías para ayudar a la ciudad de Londres

El rey Carlos II está rodeado a su vez de otras alegorías, a las cuales les ordena que se dirijan hacia la escena de la ciudad de Londres abatida para rescatarla y reconstruirla. Por delante del rey se encuentran, la Ciencia (llevando en su mano una representación de la Naturaleza y en su cabeza una corona alada formada por puttis o niños desnudos danzando), la Arquitectura (mujer con torso desnudo que porta un pergamino, una escuadra y un compás) y por último la Libertad (ondeando un sombrero). Detrás del monarca y su hermano, dos alegorías más, la Justicia (con una corona real en la cabeza) y la Fortaleza (acompañada por un león y alzando su brazo con una espada en la mano). En el fondo de este grupo, aparece la reconstrucción de la ciudad, con unos andamios de madera que envuelven una nueva arquitectura y un obrero trabajando en ellas.

En las caras Norte, Sur y Este del plinto, el Dr. Gale (maestro de la escuela de San Pablo), bajo aprobación de Sir Christopher Wrin, Mr. Robert Hook y, sobre todo, el monarca Carlos II, redactó unas leyendas que fueron grabadas en latín y con letras capitales.

Leyenda en latín con la narración del Gran Fuego

En la cara Norte el texto dice: «En el año de Cristo 1666, el 2 de septiembre, a una distancia hacia el este de este lugar de 202 pies (61m), que es la altura de esta columna, se produjo un incendio en la oscuridad de la noche, en el cual, el viento devoró los edificios que incluso estaban a distancia, y se precipitó a través de cada manzana devastandolo con una rapidez y ruido asombroso. Se consumieron 89 iglesias, puertas, la Lonja, edificios públicos, hospitales, escuelas, bibliotecas, un gran número de bloques de edificios, 13.200 casas, 400 calles. De los 26 distritos, destruyó completamente 15, y quedaron 8 mutilados y medio quemados. Las cenizas de la ciudad, que cubren hasta 436 hectáreas, extendido en un lado de «the Tower» a lo largo de la orilla del Támesis hasta la iglesia de los Templarios, en el otro lado del norte-este a lo largo de los muros hasta la cabeza de Fleet Ditch. Sin piedad a la riqueza y bienes de los ciudadanos, fue inofensivo para sus vidas, así que como en todo para recordarnos la destrucción final del mundo por el fuego. El caos no se hizo esperar. En un corto espacio de tiempo se vio cómo la misma ciudad más próspera ya no lo era. Al tercer día, cuando ya se habían agotado por completo todos los consejos y los recursos humanos, en una proclamación, como bien debemos creer en el cielo, el fatal incendio quedó a su curso y por todas partes se extinguió».

En la cara Sur la inscripción dice: «Carlos Segundo, hijo de Carlos el Mártir, rey de Gran Bretaña, Francia e Irlanda, defensor de la fe, el príncipe más misericordioso, compadeciéndose del deplorable estado de las cosas, mientras que las ruinas estaban todavía humeantes y para mantener la comodidad de sus ciudadanos, y el ornato de su ciudad; remitió sus impuestos y refirió las peticiones de los magistrados y los habitantes de Londres, al Parlamento, que inmediatamente aprobó una ley, por la cual las obras públicas deben ser restauradas de una mayor belleza, con dinero público, para ser alzados por una imposición sobre las brasas; que las iglesias y la catedral de St. Paul, deben ser reconstruidas desde sus cimientos, con toda la magnificencia, que los puentes, puertas, y las prisiones deben ser realizados de nuevo, limpiar el alcantarillado, que las calles fueran enderezadas y regulares, así como nivelar las calles empinadas y las que son demasiado estrechas que se hicieran más amplias, los mercados y el desorden fueran trasladados a lugares separados. También se aprobó que todas las casas deben ser construidas con paredes (compartidas), y todas se levantaran con la misma altura al frente, y que todas las paredes de las casas deban ser reforzadas con piedra o ladrillo, y que ningún hombre debe retrasar la construcción más allá del espacio de siete años. Además, se procuró una ley para resolver de antemano las condiciones que se originen respecto a límites, sino que también estableció un servicio anual de la intercesión, y por ello ha causado que esta columna sea erigida como un monumento perpetuo a la posteridad. Con rapidez se ve por todas partes que Londres se levanta de nuevo, aunque con mayor velocidad o mayor magnificencia sea dudosa, tres cortos años completan que la que se considera la obra de una época».

Y en la cara Este, en donde se encuentra la entrada para subir al mirador, una breve inscripción dice: «Este pilar se inició, siendo alcalde de Londres Sir Richard Ford, KNT, en el año 1671;. Llevada a lo más alto durante las alcaldías de Sir George Waterman, KNT, Sir Robert Hanson, KNT, Sir William Hooker, KNT,… Sir Robert Viner, KNT, y Sir Joseph Sheldon, KNT,.. y se terminó en la Alcaldía de Sir Thomas Davies, en el año del Señor 1677».

Finalmente, el monumento es una magnífica muestra de monumentos conmemorativos del siglo XVII en Londres. Hoy, a pesar de estar rodeado de grandes y modernos edificios, puede verse su colosal altura y se pueden contemplar las maravillosas vistas de Londres desde su mirador (tras abonar 3 libras).

¿CÓMO LLEGAR?

Dirección: Fish Street Hill, The City, London, EC3R 6DB

Metro: Monument Station (Circle Line, Distric Line y conexión con Northern Line)

Mapa: 

 
Deja un comentario

Publicado por en 4 marzo, 2012 en Arte en Londres

 

Etiquetas: , , , ,

THE YORK WATERGATE (EMBANKMENT GARDENS)

Resumen: La puerta The York Watergate fue el acceso monumental que daba al río Támesis en el antiguo palacio del Duque de Buckingham. Una puerta realizada en 1626 en un estilo completamente italiano.

Summary: The York Watergate was monumental  access overlooking the river Thames in the old palace of the Duke of Buckingham. A door made in 1626 in a completely Italian style.

Entre los cientos de rincones curiosos y monumentos artísticos que tiene la ciudad de Londres, quiero hacer mención de uno de ellos que me ha parecido fascinante en cuanto lo descubrí. Se trata de una puerta realizada a modo de arco triunfal llamada The York Watergate o también Buckhingham Watergate situada en Embankment Gardens.

Es lo único que queda de uno de los palacios y jardines más espectaculares de Londres bajo el reinado de Carlos I (reinado 1625-1649), propiedad del Duque de Buckhingham. El origen fue la construcción de una casa para el obispo de Norwich, en 1237, la cual fue comprada posteriormente por el rey Enrique VIII (1541-1547) y engrandecida por el Arzobispo de York en 1556 (motivo por el cual se la conoció desde entonces como York House). En 1620 fue adquirida por Georges Villiers, primer Duque de Buckhingham, quien la vendió en 1672 con la única condición de que su nombre y título fueran recordados por siempre.

Hacia 1626, el Duque de Buckhingham mandó levantar una puerta monumental en el embarcadero que diera acceso a los jardines del palacio. La autoría de la puerta no está clara, aunque parece que pudieron participar algunos de los arquitectos más destacados del momento como Sir Balthazar Gerbier (1592-1663), Iñigo Jones (1573-1652), introductor de la arquitectura paladiana en Londres, o Nicholas Stone (1586/87-1647), diseñador de la puerta The Danby Gateway (Oxford) y de gran semejanza a The York Watergate. Es una arquitectura realizada a la manera italiana, bajo influencia directa de los dibujos del tratado del Serlio, y las características básicas del estilo rústico, en el que el trabajo de los sillares almohadillados de una manera rústica es lo más destacado, además del uso de un tipo de columnas, entablamento y tímpano central a la manera clásica. La parte posterior de la puerta resulta más austera que la parte principal, pero sin perder en ningún momento el estilo característico de Sebastián Serlio.

Para conocer la ubicación original de la puerta y el paisaje de la rivera del Támesis, aún se conservan algunas pinturas del siglos XIX que nos acerca más a imaginarnos cómo era.

1850. Henry Pether (Museum of London)

1872. John O’connor.

A principios del siglos XIX el palacio desapareció, y con la creación de los jardines de Embankment, la puerta fue desplazada de su emplazamiento original 135 metros, siendo hoy una de las pocas muestras del arte barroco de influencia italiana en la ciudad de Londres.

¿CÓMO LLEGAR?

Dirección: Victoria Embankment Gardens, City of Westminster, London, WC2N 6PB

Metro: Embankment (Districk Line, Circle Line, Northern Line y Bakerloo Line)

Mapa:

 
Deja un comentario

Publicado por en 27 noviembre, 2011 en Arte en Londres

 

Etiquetas: , , , , ,

 
NECRÓPOLIS MEDIEVALES excavadas en la roca

de sepulturas excavadas en la roca

DICCIONARIO DE PINTORES ALICANTINOS

&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&& Por amor al arte alicantino

Sorolla en Jávea

"Este es el sitio que soñé siempre, mar y montaña, pero ¡qué mar!"

cipripedia

El sitio de mi recreo

INVERSA

ARQUEOLOGÍA Y PATRIMONIO CULTURAL

Dimes y Diretes

de San Román de los Montes

Arte , Arquitectura y Patrimonio

Just another WordPress.com weblog

Te Cuento Madrid

Hay un Madrid por descubrir... ¿te lo cuento?

Investigart

El blog de historia del arte

El arte de educar

Como el albayalde es carbonato de plomo blanco que prepara el lienzo o la madera para obtener la pintura o la policromía, la educación es el albayalde para lograr que cada persona sea una obra de arte

Urban Idade

Memorias de las redes urbanas

Exploring London

A blog about London and its history...

London Incognito

Porque hay un Londres que no sale en las postales, porque hay "otro" Londres...

LA CULTURA CRÍTICA

Gestoras Culturales en busca de la fórmula perfecta del Patrimonio Cultural

Mundo + Arte

Pasión por descubrir

ARTES

Iberian & Latin American Visual Culture Group